L a  G r a n  E n c i c l o p e d i a   I l u s t r a d a  d e l   P r o y e c t o  S a l ó n  H o g a r

 


 

 

LA PASIÓN SEGÚN
ANTÍGONA PÉREZ


de

LUIS RAFAEL SÁNCHEZ

 

 

Adaptación:

Andy Miranda

2005

 

PERSONAJES

PERIODISTA 1

PERIODISTA 2

PERIODISTA 3

PERIODISTA 4

AURORA

ANTÍGONA

CREÓN MOLINA

MONSEÑOR

 

 

PERIODISTAS

 

 

PERIODISTA 1.-   Buenos días Latinoamérica

 

PERIODISTA 2.-   Buenos días país

 

PERIODISTA 3.-   En una edición especial trasmitiremos para todo el mundo imágenes   exclusivas.

 

PERIODISTA 4.-   En vivo y en directo

 

PERIODISTA 1.-    Desde los sótanos  del palacio del generalísimo Creón Molina.

 

PERIODISTA 2.-   Veremos momentos cruciales para la joven antífona Pérez.

 

PERIODISTA 3.-   No se deje llevar por las apariencias. No se pierda ningún detalle.

 

PERIODISTA 4.-   Haga su propio juicio.

 

PERIODISTA 1.-   Para mayor información, Antígona Pérez, quien desafiara a la autoridad de nuestras máximas instituciones con su participación en los sucesos del pasado trece de abril, sigue detenida en los sótanos del palacio.

 

PERIDISTA 2.-   El generalísimo Creón Molina recibirá hoy la visita del muy reverendísimo Monseñor Bernardo Escudero, siendo está su primera visita oficial de su eminentísima desde que regresara  del Vaticano  a raíz de los sucesos del trece de abril.

 

PERIODISTA 3.-   La facinerosa  Pérez se ha resistido a todo interrogatorio de las  más altas autoridades de la República.

 

PERIODISTA 4.-   El Generalísimo Creón Molina ha convocado a una magna concentración popular a efectuarse el próximo domingo a lo largo de la avenida.

 

PERIODISTA 1.-    El Generalísimo Creón Molina se informó que la escaramuza del pasado trece de abril estaba controlada por ideologías extrañas a nuestra cristiana manera de vivir.

 

PERIODISTA 2.-   Estamos recibiendo las primeras imágenes.

 

 

 

ANTÍGONA – AURORA

 

 

AURORA.-   Antígona…mi Antígona pequeñita.

 

ANTÍGONA.-   Mamá.

 

AURORA.-   Quise venir la misma noche que te prendieron pero te tenían incomunicada.

 

ANTÍGONA.-   Esta bien mamá.

 

AURORA.-   Si tu padre estuviera vivo, su Antígona pequeñita encerrada como una criminal… como una mujer sin clase…, sin apellido. Mi Antígona.

 

ANTIGONA.-   Mamá, las mujeres  que tu llamas sin clase, sin apellido, tampoco merecen una condena injusta.

 

AURORA.-   Tu no me entiendes, nunca me entiendes. Quiero decir que hay gente para todo, gente para quien estar en la cárcel no supone una afrenta, gente que no tiene mayor aspiración que comer una vez al día. Tú no estás hecha para esos extremos. Es otra piel la tuya. Bien criada celebrada por un escogido circulote gente de primera. Señalada por un apellido reverenciado en toda la republica. Nada menos que una Pérez y Santistaban.

 

ANTÍGONA.-   Nada menos que un ser humano, mamá. Los apellidos, los escogidos círculos de primera, son signos de una manera de ver el mundo que no es la mía.

 

AURORA.-   El mundo es de una sola manera, Antígona. Personajes principales, personajes secundarios, comparsas. Así fue siempre, así es siempre, así será siempre.

 

ANTÍGONA.-   Mamá es inflexible cuando de definiciones se trata. El mundo es de una sola manera. Así lo piensa, verdaderamente. Cuando un pueblo se levanta  contra su tirano, lo condena. Cuando los negros se levantan contra sus  blancos, los  condena. Cuando un esclavo se levanta contra su amo, lo condena. Defiende tajante su actitud alegando que, si hasta entonces lo han aceptado, para que necesitan cambiar. Y no me preocuparía si esa fuera la pueril interpretación de la historia de una mujer que ha vivido de la ostentación, del privilegio, del halago. No. La voz de mama es peligrosamente mayoritaria. A su lado están los mas, los que resisten a todo cambio, los que preguntan. ¿En donde duermes?. ¿Es buena la comida? ¿No te asusta lo que  dicen los periódicos?

 

AURORA.-   Tus locas ideas que no sirven para nada.

 

ANTIGONA.-   ...que no sirven para nada.

 

AURORA.-   ¿En donde duermes?

 

ANTIGONA.-   Aquí.

 

AURORA.-   Pero ¿en donde, en  donde?

 

ANTIGONA.-   En el piso, en las escalinatas, donde me sorprenda el sueño. Mi espalda ha domado las baldosas.

 

AURORA.-   En el piso, como las bestias. Sin una frisa que espante el frío.

 

ANTIGONA.-   El frío no baja a los sótanos de Creón. Nada que necesite estarse en libertad baja acá. Los presos políticos, si. Creón los exige vecinos de su  conciencia.

 

AURORA.-   Mi Antígona pequeñita sepultada en esta  oscuridad espesa. De niña te asustaba  la oscuridad.

 

ANTIGONA.-   Era natural. Tenia ocho años.

 

AURORA.-   Ocho años y un carácter férreo de adulto, de viejo. Tu padre y yo nos  divertíamos cuando ponías el gesto grave y preguntabas con urgencia de los asuntos de la Republica. Nos divertíamos y nos  asombrábamos. Éramos felices.

                                 No nos faltaba nada. Tu padre era gran coronel del ejercito. Nada. Posición, opulencia, clase. La mansión de Miramar era un hervidero de galas. Los mas altos dignatarios de la milicia y de la iglesia reunidos  en el esplendor de nuestra  casa. Una familia hermosa, respetable, prospera, sin preocupación ni obligación.

 

ANTIGONA.-   Pobrecita mama que contempla su pasado como una  hoja  amarillenta postal de viaje.

 

AURORA.-   Hasta que tu padre... se jugo la carta equivocada. Antígona..., la  salvación empieza con el arrepentimiento. Se lo dije a Guillermo. Te lo repito a ti ahora. ¿Por qué no declaras que hubo un mal entendido?

 

ANTIGONA.-   Por que no lo hubo.

 

AURORA.-   Confiesa el lugar donde  desterraste a los Tavares, hazte cargo de la culpa y suplica un castigo menor. Los periódicos no se cansan de condenarte. Se han vuelto como locos pidiendo un  rápido juicio que señale lo que ellos  llaman responsabilidades.

 

ANTIGONA.-   Si supiera  del delito que se me  acusa, tal vez lo haría.

 

AURORA.-   Robaste unos muertos que eran propiedad  de la Republica.

 

ANTIGONA.-   Héctor y Mario Tavarez dejaron de ser mis amigos y se hicieron mis hermanos. Los muertos son de sus  vivos.

 

AURORA.-   El generalísimo dice...

 

ANTIGONA.-   Creón se llama.

 

AURORA.-   Creón dice que su gobierno tenia la obligación de enjuiciar a los que  intentaron asesinarlo. Creón dice que los Tavares intentaron un golpe de estado con el único propósito de ceder la nación a potencias extranjeras.

 

ANTIGONA.-   Los Tavarez planearon asesinar a Creón. Estaban convencidos  de que su muerte provocaría la crisis que llevaría a algo menos inútil que esta  dictadura. Tan sencillo como eso.

 

AURORA.-   Antígona, abandona tu terquedad. Si no por ti, por mi. Si no por mi, por Fernando, que te quiere.

 

ANTIGONA.-   Fernando.

 

AURORA.-   A pesar  de que  le disgusta esta  situación, te quiere. Si regresaras, inmediatamente  se casarían, se mudarían al interior, lejos  de las murmuraciones, a un sitio tranquilo donde podrían levantar una familia hermosa, respetable, prospera...

 

ANTIGONA.-   Sin preocupación ni obligación. no. Quiero a Fernando. Lo quiero profundamente. Pero no puedo renunciar, ni siquiera por su amor, a las convicciones que respaldan mis actos.

                                 Fernando me querrá a mi, a Antígona Pérez, tal como me conoció. Aspirar a que Creón me perdone sin sentirme culpable es empezar a ser como soy. Imposible. La vida es intransferible, mama. Los deberes son intransferibles.

 

AURORA.-   Si fueras hombre... excusaría mis  ruegos, los ocultaría. Inventaría el valor necesario para gritarte: sigue, hijo mío sigue. Si fueras un hombre. Pero eres nada mas que una  mujer. Callar y bordar, Antígona.

 

ANTIGONA.-   También las mujeres tenemos que protestar, también combatir lo que sepamos injusto. ¿O es que al momento de sufrir se quedan los hombres con todo el dolor?

 

AURORA.-   ¿Qué ganas, Antígona? Los Tavarez ya están muertos.

 

ANTIGONA.-   ¡Que sabes tu  de morir o vivir!

                                 Los hombres no acaban cuando mueren. Los hombres grandes, digo, los que entregan su vida para que tu, yo, el otro, vivamos. Entiende ahora porque el padre nuestro te dejo venir hoy.

 

AURORA.-   No se.

 

ANTIGONA.-   Te dejo venir hoy, confiado en que tu presión de madre  pudiera conmoverme... o, lo que es igual, pudiera pagarme la llama. Creón esta acorralado, mama. ¿Habías intentado venir antes?

 

AURORA.-   Cada día desde que te prendieron; te lo dije al llegar.

                                 Y siempre arrodillada como mendiga de las que venían nuestra mansión de Miramar los días  sábados por la mañana.

 

ANTIGONA.-   No sigas. Mas bien te haría oír que te apostaste en los portones del palacio con la  exigencia de que  se te  condujera al lugar donde el tirano encarcelaba a su hija.

 

AURORA.-   No me harían caso. Son hombres fuertes los guardias, los mejores del ejercito, los mas duros. No iban a asustarse, con una  calamitosa.

 

ANTIGONA.-   Al principio, no. Pero cuando el aullido tuviera dos  días, dos  infinitos días tratándose el palacio de sacarse el filo de su grito. Creón mismo habría salido a suplicarte que vinieras a verme.

 

AURORA.-   Creón mismo habría salido a quitármelo todo.

 

ANTIGONA.-   ¿Qué te queda  que no quieras perder? A Papá lo mataron hace ya años.

 

AURORA.-   Calla.

 

ANTIGONA.-   Tu única hija será  fusilada después de someterla  a las peores torturas . ¡ A algunas le han roto el virgo con una  botella!

 

AURORA.-   No digas mas.

 

ANTIGONA.-   La mansión de Miramar dejo de pertenecernos cuando el féretro de papa doblo la esquina. El techo que te dieron el en caserío nunca ha sido tuyo.

 

AURORA.-   Mío...Mío...

 

ANTIGONA.-   Si lo es, ¿por qué prohibirlo a su hija?

                                 El ordenado Creón te ordeno que me echarás cuando un delator de los miles de comités de vigilancia me acuso de tener amistad con subversivos y descontentos.

 

AURORA.-   EL régimen de Creón Molina nos impuso una vigilancia estrecha, asfixiante. No había sitio donde quisiera reposar la vista que no encontrara otros ojos. El miedo me cundió. Miedo de calidad. Del que sobresaltan  si te tocan la puerta. Del miedo que se hermana al temblor si el teléfono llama. El mismo miedo atroz que una  mañana saca  ala hija de la casa.

 

ANTIGONA.-   No fuiste tu la que me echaste. Me  hecho Creón.

 

AURORA.-   Peor. Te hecho mi miedo a Creón.

 

ANTIGONA.-   Pero que te quedaba por perder si gritabas en esos  portones. Si te apresaban vendrías a dar a estos sótanos a los sótanos donde estaba tu hija. Si te mataban, rompían ellos por ti el nudo de la soledad, se decidían por el extremo al que  tu no acudirías nunca. ¿quedaba algo mas por perder?

 

AURORA.-   Acaso... el miedo. La lealtad al miedo. el miedo que es el único libre en la ciudad. El miedo que es como Dios, por que siendo uno se está en todas partes.

 

ANTÍGONA.-   Mamá...el miedo está en todas partes. También en palacio. También en Creón.

 

AURORA.-   Bajemos la voz.

 

ANTÍGONA.-   Sí, si, Creón está acorralado por el miedo. En sus sótanos ha aprisionado a una mujer. Peor. Una muchacha. La muchacha es culpable de dar sepultura a dos amigos a quienes quería como a dos hermanos. Creón teme que el resquicio del malestar se haya abierto. Creón piensa que mientras sólo él lo intuya no habrá peligro. Pero tarde o temprano habrá que terminar.

 

AURORA.-   Antígona, ¿ por que tienes que ser tú?

 

ANTÍGONA.-   Está ves me tocó a mí. Luego le tocará a otros.

 

AURORA.-   Los otros no son mis hijos.

 

ANTÍGONA.-   No lo son. Pero también su ausencia desgarrará las gargantas. El dolor se parece tanto al dolor. Ahora vete. Creón llegará pronto en su acostumbrada ronda matinal. No quiero darle el privilegio  de oír nuestras tristuras.

 

AURORA.-   ¿Me dejará volver?

 

ANTÍGONA.-   Necesita que vuelvas. Necesita que todo lo que quiero me estremezca.

 

AURORA.-   Antígona, sufres.

 

ANTÍGONA.-   No.

 

AURORA.-   Puse unas cortinas en tu cuarto. Quedaron muy bonitas.

 

ANTIGONA.-   Si, mamá, sufro.

 

PERIODISTA

 

 

PERIODISTA 1.-   ¿Qué dice Antígona Pérez?

 

PERIODISTA 2.-   Antígona Pérez dice que no se arrepiente de su delito.

 

PERIODISTA 3.-   ¿ Que piensa Antígona Pérez?

 

PERIODISTA 4.-   Antígona Pérez piensa que nuestras instituciones pueden alterarse según caprichos de unos y otros.

 

PERIODISTA 1.-   ¿Qué sabe Antígona Pérez?

 

PERIODISTA 2.-   Antígona Pérez sabe que sus simpatizantes forman un grupo ínfimo, sin fuerza, sin peso.

 

PERIODISTA 3.-   ¿Qué proyecta Antígona Pérez?

 

PERIODISTA 4.-   Antígona Pérez proyecta levantarse en armas y sembrar el terror.

 

PERIODISTA 1.-   ¿Qué siente Antígona Pérez?

 

PERIODISTA 2.-   Antígona Pérez siente aversión por nuestra noble República de Molina.

 

 

 

CREÓN - ANTÍGONA

 

 

CREÓN.-   El Generalísimo sigue siendo el Generalísimo. La escalera sigue siendo la escalera. Los prisioneros siguen siendo los prisioneros. Para haraganear es bastante la noche. Suficiente. Demasiado. El ocio tiene la consecuencia funesta de envenenar. Levanta quiero que me atiendas. Se atiende mirando de frente. Es un viejo modal que tu no abras aprendido, ocupada como estas en jugar a los conspiradores. Hoy se vence el plazo de mi piedad te diera. Por doce largos días he requerido de ti el cumplimiento de un deber ciudadano ineludible. Aquel que reconoce en el estado la autoridad suprema. Con tolerancia se te ha reclamado la devolución de unos cuerpos que a nadie pertenecen, llámese Antígona, llámese Creón, por que pertenecen al Estado, cabeza del cual es su Generalísimo. El Generalísimo a condescendido a posponer día a día tu declaración, motivado por una virtud que le es muy cara: la paciencia. Pero el Generalísimo es ponderado... equilibrado...exacto en la repartición de sus virtudes y no sabe extremar ninguna de ellas. El Generalísimo hubiera preferido una confesión pronta, confesión que dejara fuera los excesos de...

 

ANTÍGONA.-   Tortura...

 

CREÓN.-   Disciplina...

 

ANTÍGONA.-   Tortura...

 

CREÓN.-   Rigor.

 

ANTÍGONA.-   Tortura...

 

CREÓN.-   Presión a la que tuvieron que recurrir los guardias. Debo abonar a su favor que llevaban tres noche en los sótanos sin cumplir la obligación que su superior le había impuesta, no por negligencia o ignorancia de su parte si no por esa obstinación tuya en callar lo que ahora  gustosamente me vas a decir. Sin encono. Sin ira. Sin odios, Antígona pequeñita.

                                 Antígona, la ley que me confiere el poder de ordenar el fusilamiento de cualquiera que, a mi juicio, amenace la seguridad nacional. Me interesa que vivas, muchacha que te reintegres, prontamente a la sociedad a la que has faltado. No voy a permitir que un desmán, una aventura arriesgue tus posibilidades  de mujer joven. Vamos a hablar como amigos...como compañeros...como colegas que se necesitan mutuamente. Antígona, ¿donde enterraste a los subversivos?

 

ANTÍGONA.-   En su tierra.

 

CREÓN.-   Bien. La contestación es correcta: en su tierra. Correcta en cuanto a los tavárez nacieron, vivieron, murieron aquí. Correcta en cuanto que nuestra noble ciudad de Molina acoge en su seno a todos sus hijos, sin discriminar contra los que no supieron enaltecerla. Correcta a pesar de que una enfermiza ambición llevó a los hermanos Tavárez a abrazar ideologías repugnantes...

 

ANTÍGONA.-   Con esa carta te jugarás toda la partida.

 

CREÓN.-   Ideologías repugnantes a nuestra cristiana manera de vivir. El interrogatorio ha comenzado feliz mente. Tu disposición a conversar me place. Mas me entusiasma. Los periodistas necesitan enterarse inmediatamente de tu cambiada actitud. Avisaré que detengan la edición de la tarde.

 

ANTÍGONA.-   Detendrán la edición de la tarde, ante la insinuación de una noticia que puede desatar la histeria. La prensa en Molina es un comité del partido único de Creón, un comité minado de sensacionalismo.

 

CREÓN.-   La segunda pregunta. ¿qué relación tenías con los subversivos? La de compañeros de estudios no sería. Los Tavárez eran ingenieros; querían serlo, debe corregirse, pues nunca acabaron la carrera. Tu, en cambio, estudiabas historia. Amistad, no. Los Tavárez eran clasistas, no iban a hacerse amigos de una muchacha a quien su propia madre se vio obligada a echar de la casa.

 

ANTÍGONA.-   Creón está arruinado. Creón agotó su repertorio de intrigas.

 

CREÓN.-   ¿Interés amoroso? Dicho mejor: ¿alguna turbia relación en la que Antígona fuera una especie de mujerzuela asalariada? Imposible. Héctor  Tavárez fue castrado en una riña callejera.

 

ANTÍGONA.-   Creón cataloga de riña callejera lo que fue  una emboscada de sus guardaespaldas.

 

CREÓN.-   Las acusaciones necesitan el respaldo de la evidencia. El proceso que se siguió contra los atacantes a Héctor tavárez fue brillante en todos sus aspectos. La justicia pidió el destierro para los culpables y en el destierro están.

 

ANTÍGONA.-   Preciosa ocasión de salir de tres disidentes que no tenían relación ninguna con el ataque. En cambio, la recompensa a los hampones fue un asiento en el mas alto organismo internacional.

 

CREÓN.-   Perra, arrastrada, embustera. Basta. Comunicaré a la prensa que el desafió que Antígona Pérez hiciera a las mas altas autoridades de la República fue motivado por unas relaciones sinuosas entre ella y los subversivos.

ANTÍGONA.-   Acepto tu reglas. Rápido. Sencillísimo. Antígona reclama la tercera pregunta . No te permitas el sosiego. Pregúntame Creón qué armas usaron los hermanos Tavárez cuando te atacaron.

 

CREÓN.-   Los Tavárez atacaron la voluntad del pueblo.

 

ANTÍGONA.-   Atacaron al enemigo de este pueblo, que silencia con balas a los disidentes.

 

CREÓN.-   Hay un partido de oposición a la República.

 

ANTÍGONA.-   Un partido que tú mismo creaste, partido que subvencionas con gusto, que argumenta a tu favor los argumentos que tú, tirano, les señalas. La tercera pregunta.

 

CREÓN.-   Falso que mi gobierno sea una tiranía. Ahí estás tú y tus mezquindades. Tú, suelta, por los sótanos, casi libre o libre de una vez porque tienes soldados que vigilan, protegen, defienden tu libertad.

 

ANTÍGONA.-   Si no cuidaras de mi libertad, ¿cómo podrías quitármela luego? 

 

CREÓN.-   No debo quitarte la vida, Antígona . La muerte a tu edad parece heroísmo.

 

ANTÍGONA.-   Acepto tus reglas. Juega.

 

CREÓN.-   Y en mi República no hay universo para los héroes.

 

ANTÍGONA.-   La pregunta.

 

CREÓN.-   ¿Qué aspiraban a conseguir los tavárez?

 

ANTÍGONA.-   La crisis que provocaría tu muerte.

 

CREÓN.-   ¿Qué fuerzas se ocultaban tras los Tavárez? 

 

ANTÍGONA.-   Ninguna.

 

CREÓN.-   Terroristas ajenos a nuestra tradición de pueblo devoto.

                            El entierro de los cobardes necesitó colaboradores. Primero el de alguien que pusiera la bomba que atrajo la atención de mis guardias. Segundo el da alguien que te ayudara a subir los cadáveres al auto. Tercero alguien que te ayudara a cavar las sepulturas. Dame los nombres.

 

ANTÍGONA.-   No los hay.

 

CREÓN.-   Invéntalos.

 

ANTÍGONA.-   Eso lo harás tú con mas juicio. Es la oportunidad de una  purga eficaz. Toda la gente que te desagrade.

 

CREÓN.-   ¿Dónde enterraste a los Tavárez? Dímelo y olvidaré que me has faltado, olvidaré que desafiaste la ley de Creón, olvidaremos juntos. Aprovecha mi generosidad, criatura. Dime dónde los enterraste y vete en seguida.

 

ANTÍGONA.-   En su tierra, Generalísimo Creón Molina, en la tierra que corresponde a sus cuerpos, en la tierra donde tu ley no es buena.

 

CREÓN.-   Te complazco, te complaceré. Seguidamente. Antígona gusta del dolor. Antígona tendrá todo el dolor que guste. Sin piedad.

 

ANTÍGONA.-   Harán lo mas terrible. Lo que rebaje mi honestidad. Lo que sacuda las raíces mismas de mi resistencia violarán mi cuerpo con la esperanza de que violan mi espíritu.

                            Como si la lealtad a mis hermanos no estuviera preparada para el sacrificio. Harán lo mas horrible en sus términos. El cuerpo, me mancharán el cuerpo. Porque Creón sí es el amo de los cuerpos. Pero me dejarán inmaculado el corazón. El corazón es lo que importa. Harán lo mas horrible.

 

PERIODISTAS

 

 

PERIODISTA 1.-   El poder está en manos de quien sabe sostenerlo sin obligación para     nada que no sea la dignidad.

 

PERIODISTA 2.-   La dignidad está en manos de quien sabe vivirla sin deber para nada que no sea la libertad.

 

PERIODISTA 3.-   La supresión de los desalmados que pretendían aniquilar nuestra imperecedera vena democrática tiene nuestro decidido apoyo.

 

PERIODISTA 4.-   La dignidad en el gobierno del Generalísimo Creón Molina está probada por el noble gesto de dar oportunidad  a la facinerosa de defenderse.

 

PERIODISTA 1.-   La dignidad  en el gobierno  del generalísimo Creón Molina nace  de la inescapable realidad de que no hay intelecto, fuera del suyo, que pueda llevar el país por buen camino.

 

 

PERIODISTA 2.-   Recién se ha descubierto que los hilos  del atentado del pasado trece de abril  estaban manejados desde un remoto continente como parte  de una conspiración hemisférica.

 

PERIODISTA 3.-   Después de un extenso interrogatorio la facinerosa Antígona Pérez confesó que durante los últimos meses mantuvo una relación extraña, oscura e insana con Mario Tavárez, uno de los subversivos .

 

PERIODISTA 4.-   Primera plana. Su Ilustrísima, Monseñor Bernardo Escudero visito hoy el palacio para presentar sus respetos al  Generalísimo Creón Molina y a la primera dama. El muy excelentísimo y reverendísimo Monseñor Escudero manifestó que el gozo de su alma es grande al poder comunicar a este pueblo devoto el saludo lleno de amor de su segura santidad e hizo suyos los deseos los deseos de felicidad duradera dentro de los preceptos cristianos que señala nuestra hermosísima fe.

 

PERIODISTA 1.-   Monseñor departió largamente con el Generalísimo  Creón Molina y la primera dama sobre los problemas que hoy afectan a la humanidad

 

PERIODISTA 2.-   Monseñor Escudero condenó enérgicamente el atentado del pasado trece de abril  y encareció que toda gestión disidente se realice por los carriles de una leal oposición

 

PERIODISTA 3.-   Monseñor  aprovecho su visita a palacio para orientar  a la facinerosa Pérez sobre el grave delito que sus impulsos cometieran.

 

PERIODISTA 4.-   Se espera que de un momento a otro la facinerosa confiese el lugar donde enterró a los tavárez . monseñor parece ser el adalid de la jornada.

 

 

MONSEÑOR - ANTÍGONA

 

 

MOSEÑOR.-   Antígona Pérez y Santisteban.

 

ANTÍGONA.-   Evítese el Santisteban, monseñor. Déjeme el Pérez común y manoseado que así me siento mas en tierra. ¿Qué lo trae monseñor?

 

MONSEÑOR.-   tú Antígona, tú nos traes.

 

ANTÍGONA.-   Lo trae un encargo.

 

MONSEÑOR.-   Si. El encargo que aceptamos el día en que nos hicimos sacerdotes de Dios.

 

ANTÍGONA.-   Puede que el encargo de Dios satisfaga el encargo de Creón.

 

MONSEÑOR.-   Nadie sino nuestro deseo de hablarte nos pidió que viniéramos. Cree, Antígona .  

 

ANTÍGONA.-   Creo, Monseñor. Estoy en estos sótanos porque creo.

 

MONSEÑOR.-   Pero, cuida que la fe no se te convierta en soberbia.

 

ANTÍGONA.-   La denuncia de soberbia se acomoda en toda circunstancia .

 

MONSEÑOR.-   Tienes un almacén de respuestas.

 

ANTÍGONA.-   Me defiendo.

MONSEÑOR.-   No te defiendas de los que se acercan a ti por amor, por fraternidad.

 

ANTÍGONA.-   Baje la voz, Monseñor. Ha dicho usted amor. El amor es delito en el régimen de Creón, como también la fraternidad es delito. Míreme en estos sótanos, denigrado mi nombre, humillado mi cuerpo por un elemental gesto de obligada  fraternidad, obligado amor.

 

MONSEÑOR.-   La acusación que te hacen incluye esos dos sentimientos. Tu delito es el robo. El juicio se te hará desde ese única realidad.

 

ANTÍGONA.-   Lo trae un encargo monseñor.

 

MONSEÑOR.-   No nos irrita la violencia con la que quieres atajar nuestro sano deseo de conversación. En cambio, las ofensas a nuestra rectitud, si.

 

ANTÍGONA.-   Perdóneme. No soy ducha en cortesías. En mi boca solo hay heridas y desconfianzas. He vivido cada día como si fuera el último. No he tenido tiempo para pulir mi torpe manera de ser.

 

MONSEÑOR.-   Eres joven, Antígona. Tu vida si apenas ha empezado.

 

ANTÍGONA.-   Pronto llegara  a su fin.

 

MONSEÑOR.-   No te dejes morir muchacha.

 

ANTÍGONA.-   Yo no decido mi muerte, la decide Creón.

 

MONSEÑOR.-   No. La decide tu obstinación. Confiesa y vive, vive.

 

ANTÍGONA.-   Ese precio no puedo pagarlo.

 

MONSEÑOR.-   La inmediatez de la muerte te lo exige.

 

ANTÍGONA.-   No puedo resolver el problema de la muerte hasta que no resuelva el de la vida. Morir es la cuestión menos seria  del hombre.

 

MONSEÑOR.-   La mas seria. Antígona, porque es la vía de la salvación o la condena perpetua.

 

ANTÍGONA.-   La salvación se gana en la vida, la condena también; se gana en este mar de minucias cuyo vaivén no se detiene nunca.

 

MONSEÑOR.-   No pretendas aleccionar en los dogmas de la salvación y la condena. Nuestra voz es importante en las deliberaciones del concilio Ecuménico. Roma, Antígona, Roma  nos respeta el juicio.

 

ANTÍGONA.-   También Antígona respeta su juicio.

 

MONSEÑOR.-   No lo demuestran tus argumentos. No sirven los gritos para hacer la paz.

 

ANTÍGONA.-   Yo no quiero que se haga la paz mientras se abandonan los cadáveres  en la plaza.

 

MONSEÑOR.-   Tú rebeldía torció lo que era intención de estricta legalidad. Los Tavárez no fueron abandonados sino expuestos a velorio público a la que seguiría un cristiano entierro. Tu imprudencia malogró la gestión del Estado.

 

ANTÍGONA.-   Por su boca habla Creón.

 

MONSEÑOR.-   Por nuestra boca habla el deseo sincero de que la verdad rija todo proceder.

 

ANTÍGONA.-   Resumamos, Monseñor. ¿Qué me pide usted?

 

MONSEÑOR.-   No dudes en tender la mano a la vida. Vivir es la alternativa espléndida. Confiesa. Acepta tu culpa. Las leyes deben cumplirse.

 

ANTÍGONA.-   Yo cumplí las mías. Cumpla Creón las suyas.

 

MOSEÑOR.-   Perderás el alma Antígona. 

 

ANTÍGONA.-   Apostemos Monseñor.

 

MONSEÑOR.-   Dios te bendiga.

 

ANTÍGONA.-   Así sea. 

 

 

ANTÍGONA – CREÓN

 

ANTÍGONA.-   La segunda parte comenzará cuando Creón diga : te pareces a mi. El conflicto ya esta planteado. Lo que falta es que los demás entiendan que para mi no hay alternativa. Quiero vivir. Quiero ser testigo de mi tiempo. Pero no a cambio de mutilar mi propia estimación.

 

CREÓN.-   Antígona te pareces a mi.

 

ANTÍGONA.-   Gracias por mostrarme las armas, Creón.

 

CREÓN.-   Somos extraordinariamente iguales.

 

ANTÍGONA.-   Se dónde te llevará la comparación.

 

CREÓN.-   Eres tenaz, enemiga de ceder, incapaz de renunciar.

 

ANTÍGONA.-   Dilo Creón...No detendrás el suplicio.

 

CREÓN.-   Hija de Guillermo Pérez y Santisteban.

 

ANTÍGONA.-   No pronuncies ese nombre.

 

CREÓN.-   Sobrina de Creón Molina.

 

ANTÍGONA.-   ¿Qué invención es esa?, ¿qué parentesco es ese?. Me ahoga tu nuevo juego. Basta de rodeos sin provecho. No afiles mas el cuchillo. Hiérame tu nueva intriga.

 

CREÓN.-   Es un antiguo decir. La  sangre llama. Volviste  a los predios de tu tío Creón.

 

ANTÍGONA.-   ¿Por qué Antígona Pérez es sobrina de Creón Molina?

 

CREÓN.-   Porque Creón Molina y Guillermo Pérez  son hermanos. De padre, pero hermanos.

 

ANTÍGONA.-   Es una trampa.

 

CREÓN.-   Así de estrecho es el mundo. Caines los dos pero hermanos.

 

ANTÍGONA.-   ¿Por qué esperaste hasta ahora para decírmelo?

 

CREÓN.-   Necesito que confieses.

 

ANTÍGONA.-   Pensaste que una improvisada relación familiar provocaría un súbito efecto.

 

CREÓN.-   No, no alterarás tus convicciones en nombre de afecto alguno. Es un rasgo de carácter que parece repetirse entre nosotros. Cuando tu padre provocó los disturbios de la Universidad le pedí que se retractara públicamente. Como es natural, no lo hizo. Por desgracia me vi... sentenciado a prescindir de sus servicios.

 

ANTÍGONA.-   Asesino.

 

CREÓN.-   No gritemos.

 

ANTÍGONA.-   ¡Asesino de mi padre!

 

CREÓN.-   Calla tu perverso insulto. No vuelvas a maltratarme con palabras desagradables. Querías saber  por qué tarde tanto en decirte que eras mi sobrina. Paradójico. Por que esperaba que flaquearas. Deseaba que la fragilidad femenina escamoteara la fuerza heredada y flaquearas. Entonces, el parentesco hubiera sido menos doloroso. Pero eres mi raza y te debo un pequeño consejo.

                                 Cede. Yo no sé retroceder. Tú todavía puedes aprender.

 

ANTÍGONA.-   Dudas.

 

CREÓN.-   Cede tú, será mas fácil ahora. Tiene veinticinco años. Sálvate.

 

ANTÍGONA.- Dudas, Creón, si mi muerte no será el comienzo de la tuya.

 

CREÓN.-   Confiesa, Antígona. No para ti ni para mi sino para los demás. Confiésate a la República. Una ves que confieses te dejare totalmente libre. Toma mi palabra como buena. No se te hará juicio. No se te hará interrogatorio. No se te preguntará si tuviste cómplices en el entierro. Podrás regresar a la Universidad, solicitar trabajo en cualquier ministerio, hacer lo que quieras.

 

ANTÍGONA.-   Buena ocasión para estrenar tu liberalismo.

                                   Creón duda. Y dudar es no saber si se está bien o se está mal.

 

CREÓN.-   Confiesa. Necesito cerrar el capitulo del trece de abril.

 

ANTÍGONA.-   Creón tiene miedo.

 

CREÓN.-   La ley de Creón quita la vida.

 

ANTÍGONA.-   Creón esta atrapado en su propio laberinto. Si me fusila la muerte conmoverá  la República . aun cuando los periódicos desaten una campaña difamante, el encono roerá los corazones. Si me deja viva se derrumban los temores, se corroen el menos. Porque ya no habrá delito en desafiar la ley de Creón.

 

CREÓN.-   ¿Quién es Fernando, Antígona?

 

ANTÍGONA.-   ¿Qué le has hecho a Fernando?

 

CREÓN.-   Lo quieres. No todo esta perdido , ¿ves? También tú estás atrapada.

 

ANTÍGONA.-   ¿Qué le has hecho Generalísimo?

 

CREÓN.-   ¡Generalísimo! Me marcho sobrina.

 

ANTÍGONA.-   No te vayas ahora. Debo tenerte completo para mi odio. Regálame el latido de tu sangre caliente, mírame, mirémonos, tío Creón.

                                 Déjame archivarme en los ojos esa mirada que acaba de asomarse. Completa tu mirada para mi odio. El juego está por terminarse, tío Creón. No le hagas daño a Fernando. No lo invites a mi pasión .

 

CREÓN.-   A pesar de tu aventura con Mario Tavárez, lo quieres.

 

ANTÍGONA.-   Tú no alcanzas a comprender la ternura de la amistad. Mario y Héctor Tavárez eran mis hermanos. Ir por la calle con ellos era una aventura completa, respirar era una aventura. Con la apretada intensidad con la que uno se acerca a todo lo que sea final.

 

CREÓN.-   La muerte es final Antígona.

 

ANTÍGONA.-   La muerte se vive intensamente, tú lo sabrás.

 

CREÓN.-   En cambio, tu Fernando es apocado, frío. 

 

ANTÍGONA.-   Con Fernando se descubre el sosiego. A su lado la vida se toma a pequeños sorbos, como si sus minutos  fueran licores cuya borrachera dura horas. ¿qué le has hecho?

 

CREÓN.-   Lo quieres. Vive Antígona. La razón es que Fernando también te quiere. Confiesa. No se cumpla en ti  la ley de Creón. Date a Fernando.

 

ANTÍGONA.-   Darse tras la negación, tras el arrepentimiento. Darse tras confesar que el delito fue la fraternidad. Pero. ¿ qué envoltura le queda al amor? No sabes, no entiendes lo que pides.

 

CREÓN.-   Fernando sabrá.

 

ANTÍGONA.-   ¿Qué le has hecho?

 

CREÓN.-   No todo está perdido.

 

ANTÍGONA.-   No sigas. Hay una noche en que también los tiranos agonizan. Espera esa noche en tu calendario; vendrá esa noche Creón, cuando todo Molina descubra que ningún pueblo es de ningún hombre, que ningún hombre es de ningún hombre, que cada quien es de su libertad.

                                 Hasta la esclavitud tiene sus defensores hasta la ruin hipoteca de la conciencia. Hasta el juego imposible de ser libre si serlo. De ahí que la definición absoluta se persiga, se procese, se niegue. Nuestro  siglo es el siglo de la gran persecución. La salvación no estará en quedarse tranquilos, satisfechos, indiferentes, sino en cuestionar una, dos, muchas veces, si de alguna manera nos están echando de nosotros mismos. También yo comenzaré a gritar: América no cedas ; América, no sufras; América, no pierdas; América, no mueras; América, prosigue; América, despierta; América, tranquila; América, alerta.

 

CREÓN.-   Antígona, las leyes han de cumplirse aunque no complazcan nuestra exigencia. Es la única garantía de la vida social. Fíjate que  busco tu última palabra. Te he presentado dos soluciones a una misma altura y distancia. De un lado, la salvación. De otro lado, la condena. Escoge. Debemos liquidar esta cuenta con premura.

 

ANTÍGONA.-   Escojo. La salvación me la dará la muerte.

 

CREÓN.-   La decisión es tuya.

 

ANTÍGONA.-   ¿A dónde iras, tío Creón, cuando la crisis de tu gobierno tome forma de huelga general o levantamiento o golpe de estado, cuando tengas que escapar precipitadamente en un avión  de tus fuerzas aéreas

 

CREÓN.-   El pueblo está conmigo, Antígona.

 

ANTÍGONA.-   El mundo, el universo son tuyos. ¿A dónde iras Creón, destronado? A tocar los tambores de Papá Doc o asilarte en algún país europeo bajo estricta promesa de no iniciar actividades políticas. Derrochador vagabundo  de garitos y ruletas, extranjero despreciado, ridículo ex -emperador de América. 

 

CREÓN.-   Guarde tus energías para cuando el soldado dispare. Con un solo tirador bastará para liquidar  a la irresponsable. No habrá  necesidad del escuadrón de fusilamiento.

 

ANTÍGONA.-   Tendrás que matar no sólo a la muchacha irresponsable que enterró  los cadáveres de sus amigos sino a todas la muchachas irresponsables que te saldrán al paso para jugarse la vida, la vida, Creón, que exige principios hasta aquellos que insisten en negarlos. Antígona es otro nombre para la idea viva, obsesionante, entera de libertad. Las ideas no sucumben a una balacera ni retroceden desorientadas por el fuego de un cañón  amaestrado. Ni recortan su existencia porque un tirano inútil decrete pomposamente la desaparición. Matarme es avivarme, hacerme sangre nueva para las venas de esta América amarga. Aligera, Creón, aligera. Dame la muerte.

 

CREÓN.-   Fusilamiento.

 

ANTÍGONA.-   A la muerte hay que mirarla cara a cara. Quiero morir dignamente.

 

 

PERIODISTAS

      

 

PERIODISTA 1.-   Volvemos a estudio. Acabamos de ver imágenes conmovedoras

 

 

 PERIODISTA 2.-   Noticias de último momento. Antígona Pérez, una de las mas temibles delincuentes de la República cumplirá finalmente su cita con la ley

 

PERIODISTA 3.-   Mañana al amanecer  la Pérez  será fusilada en la plaza.

 

PERIODISTA 4.-   Según trascendidos la joven después del juicio le confesó secretamente a Monseñor el lugar donde enterrara a loa hermanos Tavárez.

 

PERIODISTA 1.-   Los dichos de la joven se amparan en el secreto de confesión. A otro tema.

 

PERIODISTA 2.-   Mañana tendremos un día cálido y agradable refrescando por la tarde.

 

PERIODISTA 3.-   Por otra parte. Las damas de la caridad harán su tradicional baile de mascaradas para juntar fondos y donarlos a los desprotegidos.

 

PRTIODISTA 4.-   Esta y otras noticias las podrán ver  mañana en la primera edición. Hasta mañana.

 

PERIODISTA 1.-   Buenos días Latinoamérica.

 

PERIODISTA 2.-   Buenos días país.

 

PERIODISTA 3.-   Buenos días.

 

PERIODISTA 4.-   Buenos días.

 

 

 

 

 

FIN

   

 

 

CITA DE UN LIBRO

 

Cita: SÓFOCLES. Antígona. 5º ed. Bs. As.: Eudeba, 2000. ISBN 950-23-0943-X.