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 Proyecto Salón Hogar

¿Sabia usted...

       ...quién es responsable por la muerte de Jesús?

 

Judas, ¿traidor o héroe?

 

En realidad, Judas Isacariote se trató del discípulo más fiel de Jesús. Al menos eso es lo que afirma el “Evangelio de Judas”, un libro perdido durante cerca de dos milenios que acaba de reaparecer gracias a una copia en copto descubierta en el desierto de Egipto.

Según esta obra, Judas fue el único que conocía la identidad verdadera de Jesús y colaboró en el plan divino del sacrificio del Hijo de Dios, a quien el maestro le encargó la misión más difícil: entregarlo a sus verdugos.

En realidad, el volumen forma parte de un códice de 66 páginas con tapas de cuero y papel de papiro que unos saqueadores encontraron en la década de los 70 dentro de en unas cuevas cerca de El Minya.

EL CÓDICE TCHACOS

Rodó durante treinta años por los círculos de anticuarios sin que nadie constatase su autenticidad o lo tradujera. Tras haber sobrevivido intacto por más de mil 600 años gracias al clima seco del desierto, casi se convirtió en polvo tras pasar 16 años en la caja de seguridad de un banco en el ambiente húmedo de Long Island, en la costa del estado de Nueva York.

Finalmente lo adquirió la Fundación Maecenas en 2001, que comenzó el proceso de restauración y el trabajo de puzzle de recolocar los casi mil fragmentos del papiro, bautizado Códice Tchacos, en honor de un anticuario que lo poseyó.

El pasado 6 de abril la organización National Geographic, que entró en colaboración con la Fundación, anunció el resultado de los trabajos: “El libro es de verdad. Los análisis de carbono 14, la tinta, el estilo de escritura y el contenido demuestran que fue escrito alrededor del año 300”.

El códice contiene la única copia del “Evangelio de Judas”, en una traducción al copto del original en griego. Los investigadores han logrado reconstituir un 80 por ciento del texto, que ocupa 26 páginas, y lo han publicado, por ahora sólo en inglés.

Terry García, vicepresidente ejecutivo de National Geographic, lo ha calificado como uno de los tres descubrimientos de manuscritos antiguos más importantes del último siglo, junto a los del Mar Muerto y los de Nag Hammadi (Egipto).

Se conocía la existencia del “Evangelio de Judas” por una referencia hecha por el obispo Irineo de Lyon en el año 180 en su tratado “Contra la herejía”, donde lo calificó de “historia ficticia”. Pero hasta ahora nadie sabía lo que decía.

Su mensaje transforma totalmente la figura de Judas Iscariote, que es el prototipo de la traición y la mentira en la Cristiandad.

El libro comienza así: “El relato secreto de la revelación que Jesús hizo en conversaciones con Judas Iscariote durante una semana antes de que celebrasen la Pascua”.

NO TRAICIONÓ A JESÚS

En él se pinta a Judas como “el único discípulo que conoce la identidad verdadera de Jesús”, según Gregor Wurst, profesor de Historia Eclesiástica de la Universidad de Augsburg, en Alemania, y uno de los traductores del libro.

“No lo traicionó, sino sólo hizo lo que Jesús le pidió”, afirmó Craig Evans, profesor de Nuevo Testamento de Acadia Divinity College, en Canadá.

Así, Jesús dice a Judas en el libro: “Tú superarás a todos ellos. Tú sacrificarás al hombre que me recubre”, una línea que también podría traducirse como “al hombre que me lleva”.

Lo que quiere decir es que al entregarle a la muerte, Judas facilitará la salida de Jesús de su propio cuerpo y la liberación de la divinidad que llevaba dentro, según explicó Wurst.

El texto se encuadra en la tradición de los cristianos gnósticos, que enfatizaban la importancia del conocimiento: gnosis, en griego. No se trata del concepto actual de conocimiento, sino de un conocimiento espiritual, de lo divino dentro del ser humano, que permite a la esencia de la persona escapar de la prisión del cuerpo y elevarse al espacio celestial.

La salvación consiste en despertar a ese ser divino interno, lo que se logra con el conocimiento impartido por un maestro, Jesús. Los gnósticos eran místicos, escuchaban la voz de Dios en su interior y por ello no necesitaban la intercesión de ningún sacerdote.

De ahí la animadversión que sentía hacia ellos el obispo Irineo, que contempló su éxito entre su propia congregación en Lyon.

Judas fue, según esta versión, el gnóstico por antonomasia y el discípulo de excepción de Jesús. ¡Apártate de los otros y te contaré los misterios de mi reino!, le dice Jesús en el texto, aunque le advierte de que “tú serás maldecido por otras generaciones y tú terminarás gobernándolas”.

No es la primera vez que se ha lanzado la hipótesis de que Judas actuó por indicación de su maestro y de acuerdo a un plan divino al venderlo en el huerto de los olivos con un beso.

El teólogo británico Hugh Schonfield defendió esta interpretación en su libro “The Passover Plot”, la cual fue popularizada por la película “La Última Tentación de Cristo”. Sin embargo, el Evangelio de Judas es el primer documento antiguo que apoya esta visión.

¿Es plausible lo que dice? Evans recuerda que en dos ocasiones Jesús pidió cosas en privado a dos de sus discípulos, según el Nuevo Testamento, y se pregunta si su entrega a las autoridades por parte de Judas no sería una tercera.

“Es posible que el Evangelio de Judas fuera preservado en la memoria y que los otros discípulos no lo supieran”, dijo.

CONVERSACIONES PRIVADAS

Elaine Pagels, profesora de Religión de la Universidad de Princeton (EU), destaca que los cuatro Evangelios aceptados por el canon cristiano relatan los actos públicos de Jesús, pero no conversaciones privadas.

Sin embargo, no es de esperar que el Evangelio de Judas vaya a leerse desde el atril en la iglesia durante la Semana Santa. El padre Donald Senior, presidente de la Unión Católica de Teología de EU, dijo que este texto no se ancla en ninguna tradición histórica. A su juicio, usa los personajes de los libros canónicos, pero “es una expresión de una teología específica”, la gnóstica, en su concepción del cuerpo humano y la creación, que son muy diferentes a la de los Evangelios aceptados por la Iglesia Católica.

El texto contiene, por ejemplo, su propia versión de la creación del universo físico, llevada a cabo por entidades inferiores a Dios, de ahí la maldad e imperfección de este mundo.

Aún así, el padre Senior da valor al volumen como una muestra de “la diversidad y la vitalidad de los primeros cristianos”.

Tras la muerte de Jesús, los primeros cristianos conservaron oralmente historias de su vida, que plasmaron en numerosos libros. No obstante, esa cacofonía de interpretaciones y tradiciones produjo disputas entre los distintos grupos de fieles sobre cuál era la ortodoxa.

En ese conflicto “el grupo victorioso decidió qué libros entraban en el Nuevo Testamento”, explicó Bart Ehrman, profesor de Religión de la Universidad de Carolina del Norte. En cambio, Senior dijo que los textos establecidos como sagrados fueron en los que creía “la gran mayoría” de los primeros cristianos y no los que escogió un puñado de líderes religiosos.

En todo caso, fuera quedaron, por ejemplo, el Evangelio de Pedro, el Evangelio de María Magdalena y el Libro Secreto de Juan. Además del Evangelio de Judas, el propio Códice Tchacos contiene el libro titulado Santiago, también conocido como el Primer Apocalipsis de Santiago, la Carta de Pedro a Felipe y un fragmento de una obra desconocida hasta ahora y llamada provisionalmente Allogenes, o el Libro del Extranjero. Estos textos aún no han sido restaurados y traducidos.

Quién escribió el Evangelio de Judas es otro misterio. En ningún lugar se dice que fuera Judas, pero eso no debería hacer dudar per sé de su veracidad, pues la autoría de los Evangelios del Nuevo Testamento tampoco está asegurada. “La mayoría de los textos son escritos en nombre de alguien más famoso”, como lo es un discípulo de Jesús, según Marvin Meyer, profesor de Estudios Bíblicos y Cristianos de la Universidad Chapman, en California, y otro de los traductores del papiro.

Al contrario que los Evangelios de Mateo, Marcos, Lucas y Juan, el de Judas no es un relato de la vida de Jesús, sino que sólo cuenta la revelación que le hace en vísperas de la Pascua. Termina de forma abrupta, cuando el discípulo entrega a su maestro, y no habla de la crucifixión y la resurrección. Tampoco dice si Judas, el héroe de esta nueva historia, se suicida.

 

¿Qué dice el texto?

El documento presenta a Judas Iscariote de manera positiva y le describe obedeciendo a la orden divina de entregar a Jesús a las autoridades para la salvación del mundo. En él se pinta a Judas como "el único discípulo que conoce la identidad verdadera de Jesús". Veamos algunos de los textos, traducidos del inglés, donde se ven claramente las ideas gnósticas fundamentales.

Introducción: El comienzo...

 

 

La secreta historia de la revelación que Jesús hizo en conversación con Judas Iscariote durante una semana tres días antes de que celebrara la Pascua.

El ministerio terrenal de Jesús

Cuando Jesús apareció en la tierra, el hizo milagros y grandes maravillas para la salvación de la humanidad. Y entre que algunos (caminaron) en el camino de la rectitud y otros caminaron en sus transgresiones, los 12 discípulos fueron llamados. Él comenzó a hablarles sobre los misterios más allá del mundo y lo que sucedería al fin. A menudo no se le aparecía a sus discípulos como él mismo, sino como un niño

El enojo de los discípulos

"Un día el estaba con sus discípulos en Judea, y los encontró congregados y en piadosa observancia. Cuando se acercó a ellos y los vio dando las gracias por el pan, se rió. Los discípulos le dijeron "Maestro, ¿por qué te estás riendo de nuestra oración de gracias? Estamos haciendo lo correcto" El les respondió "no me estoy riendo de ustedes. (ustedes) no están haciendo esto por su propia voluntad sino porque es a través de esto que su dios será alabado" Ellos dijeron "Maestro, tú eres el hijo de nuestro de dios". Jesús les respondió "¿cómo me conoces? Ciertamente les digo, ninguna generación de la gente que está en medio de ustedes me conocerá".

Cuando los discípulos escucharon esto, comenzaron a enojarse y enfurecerse y a blasfemar en contra suya en sus corazones. Cuando Jesús se dio cuenta de su falta de (entendimiento, les dijo) "¿Por qué esta agitación los conduce al odio? Vuestro dios que está dentro suyo y (...) ha provocado al odio en sus almas. Dejen que cualquiera de ustedes que sea lo suficientemente fuerte entre los humanos manifieste al hombre perfecto y se pare frente a mi cara".

Ellos dijeron "Tenemos la fuerza". Pero sus espíritus no se atrevieron a pararse colocarse frente a él, excepto Judas Iscariote. El se puso delante de Jesús, pero no pudo mirarlo a los ojos, y dio vuelta su cara.

Le dijo "yo sé quién eres y de donde vienes. Tu vienes del reino inmortal de Barbelo. Y yo no soy digno de pronunciar el nombre de quien te ha enviado" Sabiendo que Jesús estaba reflexionando sobre algo que lo tenía exaltado, Jesús le dijo "aléjate de los otros y yo te diré los misterios del reino. Es posible para ti alcanzarlo, pero deberás asumir un gran trato".

Judas pregunta a Jesús sobre la humanidad

Judas le dijo "Rabbi, ¿qué clase de fruto producirá esta generación?". Jesús le respondió "Las almas de toda la generación humana morirá. Cuando esta gente, de cualquier manera, completen el tiempo del reino y sus espíritus los dejen, sus cuerpos morirán, pero sus almas vivirán y serán tomadas" Judas señaló "¿Y qué harán el resto de las generaciones?. "Es imposible () sembrar semilla en la (roca) y cosechar su fruto".

El sueño de Judas

Judas le dijo "en la visión me vi a mi mismo con los discípulos apedreándome y persiguiéndome severamente. Y además fui a un lugar donde (...) detrás tuyo y vi (una casa...) y mis ojos no podían (abarcar) su tamaño. Mucha gente estaba rodeándola y la casa tenía un techo de arbustos y en medio de la casa había una multitud -dos líneas perdidas- diciendo "Maestro, llévame junto a esta gente".

Jesús le respondió diciendo "Judas, tu estrella te ha llevado al error. Ningún mortal es digno de entrar a la casa que viste, a ese lugar reservado para los benditos. Ni el sol ni la luna gobernarán allí, ni el día, excepto los benditos morarán ahí siempre, en eterno dominio con los ángeles. Mira, te he explicado los misterios del reino y te he instruido en el error de las estrellas; (...) y (...) enviarlo (…) en las 12 eternidades".

Judas pregunta por su destino

"Ven, yo (dos líneas perdidas), pero te acongojarás mucho cuando veas al reino y toda su generación". Cuando escuchó esto, Judas le dijo "¿qué beneficio es el que he recibido? Por haberme apartado de esta generación. Jesús le contestó "te convertirás en el decimotercero y serás maldito por las demás generaciones -y tú gobernarás sobre ellos. En los últimos días ellos maldecirán tu asenso a la (generación) bendita".

Jesús habla de la traición de Judas

"Por ti se sacrificará el hombre que me reviste. Ya tu cuerno se ha alzado, tu cólera se ha encendido, tu estrella ha brillado y tu corazón (...) En verdad (...) tu último (...) convertirse (-dos líneas y media perdidas-) apesadumbrado (-dos líneas y media perdidas-) el gobernante, desde que será destruido. Y entonces la imagen de la gran generación de Adán será alabada, desde antes al cielo, tierra y los angeles, esta generación que es de los reinos eternos, existe. Mira, lo has contado todo. Eleva tus ojos y mira a la nube y la luz en ella y las estrellas rodeándola. La estrella que guía el camino es la tuya". Judas levantó sus ojos y vio la nube luminosa y entró en ella. Los que estaban en el suelo escucharon una voz desde la nube, diciendo (...) gran generación (...) ... imagen.

 

 


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