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¿Sabia usted...

       ...quién es responsable por la muerte de Jesús?

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Por Héctor A. García

En  febrero de 2004 se estrenó en varios lugares del mundo La Pasión de Jesucristo, una película que puso en la pantalla grande una versión del actor director Mel Gibson sobre la vida de Jesús basada en una mezcla de los textos evangélicos y posiciones personales de el, donde culpa al pueblo judio por la muerte de Jesús.  Por otro lado, la historia y el cristianismo siempre han puesto en la figura de Judas el emblema del hombre traidor y que entrego a Jesús a sus enemigos para ser llevado a la muerte. En mi humilde opinión ni lo primero ni lo segundo son totalmente cierto.


Dado el respeto por la libertad de expresión artística, no habría nada que objetar y solo dejar que la película sea valiosa desde el punto de vista del espectáculo que ofrece a su auditorio. Pero existe un tema asociado con el argumento de la pelicula que podría incitar al innecesario recrudecimiento del antisemitismo/antijudio, lo que hace necesario un llamado a la reflexión.

Se trata del controvertido versículo 27:25 de Mateo, que pone en boca del pueblo judío la terrible frase: 'que su sangre caiga sobre nosotros y sobre nuestros hijos', con lo cual Pilatos se sintió justificado para ordenar los azotes y crucifixión de Jesús.

Quisiera aportar algunas aclaraciones que permitan entender mejor el problema planteado por ese versículo.

*
La crucifixión y resurrección de Jesucristo son los elementos fundamentales sobre los que se construyó la religión cristiana, sin dicho elemento hoy no existiría esta religión. Forman parte del credo y del dogma y no son discutibles por ser artículos de fe, no son susceptibles o sea que no permiten un juicio de análisis histórico.

A ello precisamente debe agregarse que precisamente la existencia e historicidad de Jesús es la más elusiva que existe: no hay  evidencias históricas que respalden su existencia, solo los documentos bíblicos y 2 (dos) parrafos del historiador Flavio Josefo, los cuales han sido cuestionados por su aparente inclusion de texto.

(veamos...)

 

"Por aquella época apareció Jesús, {" hombre sabio, si es que se le puede llamar hombre, fue autor de obras maravillosas, maestro para quienes reciben con gusto la verdad."}. Atrajo a sí muchos judíos y también muchos gentiles. {"Éste era el Cristo (el Mesías)".}  

Habiendo sido denunciado por los primados del pueblo, Pilato lo condenó al suplicio de la cruz; pero los que antes le habían amado le permanecieron fieles en el amor. {"Se les apareció resucitado al tercer día, como lo habían anunciado los divinos profetas que habían predicho de El ésta y otras mil cosas maravillosas".}  De él tomaron su nombre los cristianos, cuya tribu perdura hasta el día de hoy".

Lo escrito en amarillo y {"encerrado entre comillas"} ha sido catalogado por estudiosos e historiadores como un fraude y que no es otra cosa que una interpolacion (inclusion) y manipulacion de la iglesia catolica, que se dedico a alterar escritos o a eliminar y quemar documentos contrarios a su postura oficial.

El texto real historico deberia ser este:

"POR AQUELLA ÉPOCA APARECIÓ JESÚS. ATRAJO A SÍ MUCHOS JUDÍOS Y TAMBIÉN MUCHOS GENTILES. HABIENDO SIDO DENUNCIADO POR LOS PRIMADOS DEL PUEBLO, PILATO LO CONDENÓ AL SUPLICIO DE LA CRUZ; PERO LOS QUE ANTES LE HABÍAN AMADO LE PERMANECIERON FIELES EN EL AMOR. DE ÉL TOMARON SU NOMBRE LOS CRISTIANOS, CUYA TRIBU PERDURA HASTA EL DÍA DE HOY".
 

 Históricamente se pueden probar la existencia de miles de personas sin embargo no existen fuera de este texto de Flavio Josefo (al cual doy credibilidad) datos historicos sobre la existencia de Jesús, fuera de la biblia. Esa afirmación y/o falta de evidencia histórica, no significa que no haya vivido en Judea a comienzos de nuestra era, pues nadie podría comprobar lo contrario. Sabemos del Jesús histórico tan poco como sabemos de la existencia física de Moisés.

De todos modos y para aclarar, yo estoy convencido por fe que Jesús existió y en todo caso, ésa no es la preocupación de estas líneas. Lo que me preocupa es que su vida fue descrita según las leyendas que circulaban varias décadas después y los textos originales de esos escritos jamás se encontraron, ya que los lideres de la iglesia emergente los elimino, por presentar a un Jesús mas humano y menos mitico o de naturaleza sobrehumana. Los primeros discípulos de Jesús sucumbieron más de una vez a la tentación de modificar las antiguas escrituras y profecías para conformarlas con la vida de su Señor y Maestro. En la ausencia de la imprenta, cuando la mayor parte del conocimiento humano se trasmitía oralmente de una generación a la otra, era muy fácil que los mitos se tornaran tradiciones y que las tradiciones finalmente se aceptaran como hechos.  De los escritos que hacen referencia a Jesús solo hay copias que sufrieron posteriormente inclusiones y alteraciones según los intereses de los escribas de cada época.

Una de las razones principales de la crucifixión de Jesús fue la motivación de los fariseos y la del propio Jesús de que con su muerte el pueblo judío que carecía en aquel entonces de un líder que los aglutinara o uniera, con su muerte pudiese hacerlo, con sus posteriores beneficios. La intención judía era mas que nada políticamente motivada, y la de Jesús era y fue principalmente espiritual.

Los evangelios fueron escritos para uso de las primeras comunidades judeo-cristianas alrededor de la década del año 70, en circunstancias históricas particulares que explican su estilo de redacción. Algunos historiadores sostienen que los evangelistas no conocieron a Jesús personalmente y redactaron sus textos basados en un escrito anterior, perdido, que los historiadores llaman Evangelio Q, por quelle, fuente y/o que Lucas y Mateo usaron el Evangelio de Marcos para hacer los suyos, esto ultimo esta mas que confirmado y cualquier maestro de Kidergarden en materia de fe esta al tanto de ello.

Los libros de historia informan que Roma invadió Judea en el año 68 antes de Cristo. El pueblo judío se oponía a la dominación romana, como antes se opuso a la helénica. Había diferentes sectas, pero predominaba la de los fariseos, formada por el pueblo. Sus principales opositores eran los saduceos, unos pocos aristócratas que hacían buenos negocios y habían recibido el manejo del Templo de Jerusalén, pero dependían de los romanos al punto que debían entregarles las vestiduras sacerdotales luego de cada oficio para ser guardadas en la Torre Antonia. La familia sacerdotal era manejada por Ananías, quien era poco apreciado por sus colegas saduceos y mucho menos por el pueblo, por lo que cedió su cargo a su yerno Caifás, un pelele.

1er. Punto de reflexión

Los romanos no permitían que el pueblo judío participara en los hechos políticos. Dentro de la restricción de libertades impuesta a los judíos, se les impedía juzgar las causas graves y tenían expresamente prohibido aplicar la pena de muerte por ninguna clase de delito.

2do. Punto

Por otra parte, la crucifixión era una forma de tormento aplicado exclusivamente por los romanos y tenía el objeto de castigar al culpable y amedrentar al resto del pueblo, los judíos no podían crucificar a nadie. Esos son datos que surgen del estudio de los documentos históricos de la época y que pueden ser comprobados por cualquier persona que quiera consultarlos en los libros de historia.

3er. Punto

El dogma cristiano nos enseña que Jesús, al igual que los fariseos, los esenios y los zelotas, había denunciado la actitud de la casta sacerdotal que manejaba el Templo, los saduceos, que lo habían corrompido con permanentes sacrificios de animales y los negocios de mercaderes y cambistas que operaban en el atrio, situación que está muy bien descrita en los evangelios. La mayoría de los judíos pensaba de ese modo. Jesús se atrevió a enfrentar y denunciar a Caifás y su gente, quienes luego le pidieron a los romanos que lo eliminaran. Únase a ello la intención Mesiánica autoproclamada de parte de Jesús de morir crucificado por su pueblo y cumplir así con las profecías judías.

El juicio a Jesús se hizo en sede romana y la decisión de la pena máxima fue decidida por Poncio Pilatos. Se lo acusó de sedición por no reconocer el carácter divino del emperador. Era un delito político, no religioso. A lo que se agregaba la pretensión de ser "Rey de los judíos", otro delito político, dado que los romanos designaban a dedo a los gobernadores y no admitían reyes que no fueran elegidos por ellos.

La historia romana dice que jamás se daba a elegir al pueblo la suerte de los sentenciados en asambleas públicas. Los romanos evitaban las concentraciones humanas por el peligro latente de rebelión. En el caso de que algo parecido hubiera sucedido, a nadie se le ocurrió pensar que en Jerusalén no había plazas que pudieran reunir muchedumbres. Entonces sobrevino la ejecución de Jesús a manos de los soldados romanos.

Un dato interesante para aquellos libre pensadores como yo que hacen su análisis sin pasiones ni motivaciones, es la de la propia intención del propio Jesús de que finalmente fuera sentenciado a muerte. Él hizo todo lo posible detalle por detalle hasta su consumación y lograr su crucifixión en ello se demuestra el carácter Mesiánico que el propio Jesús sé auto adjudicó y con sobrada razón. Nadie en aquella época podía calzar ni moral ni espiritualmente sus sandalias.

Transcurrida una veintena de años, Saulo de Tarso, más tarde san Pablo, vivió la revelación de la existencia de Jesús y desarrolló la base de la religión cristiana tal como la conocemos hoy. Pablo jamás conoció físicamente a Jesús y comenzó a escribir sus "Hechos de los apóstoles" alrededor del año 50. No hay ningún original en hebreo o arameo de ese libro ni de ninguno de los evangelios. Los ejemplares más antiguos están escritos en griego y son medioevales, por lo que desconocemos el texto original, aunque sabemos que sufrió numerosas modificaciones.

El malestar en Judea llegó al punto máximo en la década del 60 D.C. Estalló la rebelión judía y los romanos arrasaron Judea. Vespasiano y luego su hijo Tito demolieron Jerusalén y destruyeron el Templo, del que solo quedó en pie una pared, que conocemos como Muro de los Lamentos. Los judíos fueron masacrados, perseguidos y obligados a emigrar. Judea desapareció del mapa y poco después, los romanos rebautizaron la región como Palestina, en recuerdo de los filisteos (Philistine).

Los judios/cristianos necesitaban diferenciarse de los demás judíos para evitar la represión de los romanos, a quienes no podían acusar de haber ejecutado a Jesús sin esperar represalias, por lo que crearon la figura del versículo 27:25, desviando la culpa hacia Caifás y a un ínfimo grupo de fanáticos que pedían la muerte del profeta. Caifás y los suyos jamás representaron al pueblo judío, que los odiaba tanto como amaba a Jesús.

Hay que tener presente que los primeros evangelios se escriben en el contexto de la dominación romana y que dichos escritos no podían señalar a los romanos como culpables, baste el ejemplo de Pablo que para evitar ser ajusticiado por los judíos fanáticos a quienes sirvió, se refugio luego en su ciudadanía romana.

La acusación a toda la grey/comunidad judía no solamente no resiste el menor análisis histórico, sino que es insostenible desde el punto de vista lógico. Jesús nació, vivió y murió sintiéndose tan judío como todos los habitantes de Judea.

Cuando se escribieron los evangelios, todavía no había una división entre judíos y cristianos. Los seguidores de Jesús afirmaban que era el Mesías, lo que resultaba inadmisible para el resto de los judíos, quienes creían que el Mesías llegaría en un futuro por venir. Fariseos, saduceos, zelotas, esenios y cristianos eran judíos con distintas formas de creencias, y todos apoyaban su fe en las escrituras sagradas que conocemos como Antiguo Testamento. Recién a partir del año100 los cristianos se separaron del judaísmo y desarrollaron su religión en forma independiente. Aunque parezca desconcertante, los primeros cuatro Papas se reconocían a sí mismo como judíos.

En el siglo IV, cuando la religión cristiana fue aceptada por Constantino y pasó a ser la religión del decadente imperio romano, el versículo 27:25 de Mateo ya estaba instalado en la mente de todos los cristianos. Los judíos eran los culpables de la muerte del Mesías, dejando a salvo a sus verdaderos verdugos, los romanos. Esa tradición dio origen a las persecuciones y al antisemitismo que duraron dos mil años.

Al comenzar el tercer milenio, el Papa Juan Pablo II fue contundente cuando pidió perdón al pueblo judío por las injustas persecuciones que sufrieron durante dos milenios. Entre los considerados de su rogativa, apareció el relevo de la culpa judía por la muerte de Jesús. Pero parece que muchos cristianos no se enteraron del mensaje papal e insisten en esa acusación que, si fuera cierta, tiene la misma falta de sustentación que tendría acusar a todos los franceses por la ejecución de Juana de Arco, a todos los alemanes por Hitler o a todos los puertorriqueños por los saqueos y robos cometidos durante el periodo de Rosello.

Según partes de prensa, las autoridades eclesiásticas católicas solicitaron a Mel Gibson que eliminara ese directo sentimiento antijudio de su película. Sin embargo no lograron su propósito ya que la herencia familiar del actor es considerada una antijudia de nacimiento, tal como hay blancos racistas o negros contra blancos el odio de una raza/etnia hacia otra forma parte del prejuicio y discrimen humano que caracteriza algunos grupos, baste ver el caso de los judíos y palestinos.
 

En resumen, si fue a ver esta película y su mente termino juzgando al pueblo judío como responsable por la muerte de Jesús, usted cayo en la trampa del director, Jesús es el único responsable de su muerte pues según la propia biblia, el vino a la tierra con el único propósito intencionado de morir por usted y por mí.

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